Los dedos de las manos nos pueden ayudar a curarnos, a desbloquear emociones, problemas, tanto orgánicos como espirituales. El masajear cada dedo ayudará a equilibrar la energía que cada uno tiene, evitar dolores, traumas, pleitos y por supuesto afrontar sus problemas.
La causa de una emoción negativa es la ruptura es nuestro sistema energético.
Si nos lastimamos un dedo, golpeándolo, cortándolo, rasguñándolo, significa, según el dedo, que tenemos un problema a solucionar.
DEDO 1 PULGAR
Representa al elemento fuego, el color amarillo, la boca, el gusto, Venus, la voluntad, la tierra y la soledad. Venus le da el espíritu de iniciativa, la intuición, ideas, proyectos, lo profundo del pensamiento. La energía del dedo pulgar es para equilibrar las energías del cuerpo otorgando o eliminando energía cuando se requiere.
DEDO 2 INDICE
Representa al elemento aire, el color azul, Júpiter, sexualidad antigua, marca la autoridad, el regaño, el poder de decisión, el ego, olfato y nariz, la personalidad, poder personal, el miedo. Júpiter representa todo lo que uno quiere lograr, las metas. La energía del dedo índice es para pensar y crear y nos da diferentes estados de ánimos. Impulso divino. También ayuda a liberar dolores emocionales y lagrimas.
DEDO 3 MEDIO
Representa al elemento éter, el color verde, la calma, la madera, saca el enojo, la sexualidad, el tacto. Saturno le da la constancia y madurez. La energía de dedo medio nos da el balance para vivir en armonía con el mundo espiritual..
DEDO 4 ANULAR
Representa al elemento tierra, el color blanco, los metales, la tristeza y ansiedad. Compromiso, contratos cambios de identidad, de apellido, de casa. Duelos. Es la vista y el ojo. Su cometido es proveernos de la fuerza necesaria para defendernos y luchar por nuestros ideales. El punto energético de este dedo también nos aporta equilibrio interior para afrontar cualquier situación
DEDO 5 MEÑIQUE
Representa al elemento agua, el color rojo, la oreja y oído, secretos, mentiras, ayuda a mantener la autoestima, el amor, la familia y Mercurio que es la comunicación. Este dedo meñique nos da la posibilidad de interactuar con la sociedad y los afectos. Nuestro equilibrio emocional.
La causa de una emoción negativa es la ruptura es nuestro sistema energético.
Si nos lastimamos un dedo, golpeándolo, cortándolo, rasguñándolo, significa, según el dedo, que tenemos un problema a solucionar.
DEDO 1 PULGAR
Representa al elemento fuego, el color amarillo, la boca, el gusto, Venus, la voluntad, la tierra y la soledad. Venus le da el espíritu de iniciativa, la intuición, ideas, proyectos, lo profundo del pensamiento. La energía del dedo pulgar es para equilibrar las energías del cuerpo otorgando o eliminando energía cuando se requiere.
DEDO 2 INDICE
Representa al elemento aire, el color azul, Júpiter, sexualidad antigua, marca la autoridad, el regaño, el poder de decisión, el ego, olfato y nariz, la personalidad, poder personal, el miedo. Júpiter representa todo lo que uno quiere lograr, las metas. La energía del dedo índice es para pensar y crear y nos da diferentes estados de ánimos. Impulso divino. También ayuda a liberar dolores emocionales y lagrimas.
DEDO 3 MEDIO
Representa al elemento éter, el color verde, la calma, la madera, saca el enojo, la sexualidad, el tacto. Saturno le da la constancia y madurez. La energía de dedo medio nos da el balance para vivir en armonía con el mundo espiritual..
DEDO 4 ANULAR
Representa al elemento tierra, el color blanco, los metales, la tristeza y ansiedad. Compromiso, contratos cambios de identidad, de apellido, de casa. Duelos. Es la vista y el ojo. Su cometido es proveernos de la fuerza necesaria para defendernos y luchar por nuestros ideales. El punto energético de este dedo también nos aporta equilibrio interior para afrontar cualquier situación
DEDO 5 MEÑIQUE
Representa al elemento agua, el color rojo, la oreja y oído, secretos, mentiras, ayuda a mantener la autoestima, el amor, la familia y Mercurio que es la comunicación. Este dedo meñique nos da la posibilidad de interactuar con la sociedad y los afectos. Nuestro equilibrio emocional.
Alicia Bauer
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